Body Pump: tonifica tu cuerpo para el verano
El secreto del éxito del body pump se basa en realizar ejercicios con pesos ligeros y múltiples repeticiones. Se trata de una actividad de intensidad media alta que una vez que la pruebas no la puedes dejar. ¿Quieres saber por qué?
Las clases de body pump duran entre 45 y 60 minutos y se dividen en calentamiento, desarrollo y vuelta a la calma. Según los creadores del programa, en una sesión pueden quemarse alrededor de 600 calorías dependiendo de la persona y su condición física.
Si algo puedes tener seguro en una clase de body pump es que no te vas a aburrir. En la variedad está el gusto y eso es lo que hace de esta actividad una oferta tan atractiva para quienes están cansados de la rutina y la monotonía del trabajo con máquinas. Además, la sensación de cansancio al finalizar una sesión queda eclipsada por la del trabajo bien hecho y de bienestar general que aporta.
Sentadillas, fondos, trabajo de pectorales y diferentes tipos de ejercicios con levantamiento de pesos ligeros componen el núcleo de esta actividad al ritmo de una música moderna y dinámica que te motiva a cada paso y que cambia cada tres meses para que nunca puedas llegar a saturarte.
Prepárate para sudar y quemar grasas mientras tu cuerpo se define con un bonito tono muscular. Diversos estudios avalan que el body pump es efectivo para aumentar la fuerza y la resistencia muscular y para reactivar los músculos después un largo periodo de vida sedentaria.
Estas sesiones son muy completas porque en el body pump se trabajan todos los principales grupos musculares sin excepción. Tanto el tren inferior como el superior tienen su momento dentro de una clase.
Piernas, glúteos, abdominales, espalda, biceps, tríceps, hombros… Nada escapa al trabajo duro de una sesión de body pump. Los ejercicios se adaptan para que duren el tiempo de una canción y así rotan sin que lleguen a hacerse nunca pesados o aburridos durante la hora que dura el entrenamiento.
Las sesiones son dinámicas y las pausas entre ejercicio y ejercicio son mínimas, por lo que el nivel de exigencia es alto sobre todo al principio. Eso sí, es precisamente esta sensación de velocidad lo que la vuelve tan atractiva para muchos participantes.
Gracias al sistema de múltiples repeticiones con pesos ligeros, el ejercicio quema la grasa y tonifica el músculo sin llegar a hiperdesarrollarlo, dándole esa bonita y definida forma natural que resulta tan atractiva. A medida que progreses podrás aumentar el peso hasta un tope de unos 5 kilos, según tus objetivos y tus capacidades, aunque no es algo por lo que tengas que preocuparte: quédate donde te sientas cómodo. Habitualmente, con dos o tres sesiones por semana es suficiente para conseguir una tonificación general.
Un punto a favor del body pump es que se trata de clases colectivas donde la motivación del grupo se siente en cada sesión. Esto es muy importante para no venirte abajo con las primeras agujetas y para reafirmarte en tus objetivos cuando ves que los sacrificios tienen su recompensa.
Este ejercicio puede ser un buen punto de partida para lanzarse después a actividades más complejas y exigentes como el crossfit o el trabajo puro en máquinas porque prepara los músculos y empieza a tonificarlos. Así, dar el paso a ejercicios de musculación más severos no será tan duro.
Además, la diversión y la sensación de bienestar que aporta una buena sesión de body pump es adictiva. Tanto si buscas comenzar para seguir subiendo como si tan sólo quieres una forma entretenida de ponerte en forma, atrévete a probar esta clase que arrasa en todo el mundo.