Calistenia: qué es y cómo utilizarlo
¿Qué es la calistenia? Aunque tenga nombre de enfermedad tropical, nada más lejos de la realidad. Calistenia es el nombre que recibe un tipo de ejercicio físico en el que tu cuerpo es el único material que necesitas para tener tu propio gimnasio portátil.
Los ejercicios de calistenia tienen su origen en la antigua Grecia y han sido parte importante del acondicionamiento físico durante siglos. Seguramente si llevas tiempo en el mundo del fitness los hayas practicado alguna vez sin saberlo.
Dentro de la calistenia se incluyen todos los ejercicios compuestos de movimientos simples ejecutados sin pesas ni ningún equipamiento añadido y que van destinados principalmente a aumentar la fuerza del cuerpo y su flexibilidad utilizando el propio peso como resistencia.
Estos ejercicios son principalmente anaeróbicos y están orientados a la creación de músculo, por lo que para un entrenamiento completo es recomendable añadir además algún tipo de ejercicio cardiovascular como por ejemplo natación o bicicleta. Recuerda que no se trata sólo de quemar calorías (que también) sino de mejorar el funcionamiento del corazón, la circulación y la capacidad pulmonar.
Detrás de este vistoso nombre se esconden ejercicios como las flexiones y las dominadas de toda la vida, las sentadillas, los burpees y los fondos, entre otros muchos.
Si tu aspiración máxima dentro del gimnasio es ser fuerte, delgado, flexible, ágil y tener gran resistencia, la calistenia es para ti. Un adecuado entrenamiento de calistenia fortalecerá el desarrollo de masa muscular magra y aumentará tu fuerza, movilidad, flexibilidad, agilidad y resistencia.
Trabajar flexiones te ayudará a construir músculo en el pecho, hombro y tríceps, además de mejorar la estabilidad del core y la resistencia. Si es demasiado fácil para ti, prueba a hacerlas con un solo brazo o dando una palmada en el aire. Las dominadas, por su parte, fortalecerán tu espalda, los bíceps y las muñecas y son una buena forma de poner a prueba la fuerza del tronco y puedes ir cambiando la separación entre las muñecas para aumentar la dificultad.
En cuanto al tren inferior, ningún ejercicio gana en eficacia a las sentadillas. Parece mentira que un ejercicio tan sencillo pueda ser tan completo y útil, pero lo es y no debe faltar en ningún programa de entrenamiento que aspire a ser global.
Parte del encanto de la calistenia es que es muy autoservicio: hay tantos tipos de ejercicios disponibles que puedes coger tus favoritos o los que mejor se adapten a tus objetivos para hacer tu propio programa personalizado.
Puedes empezar a practicarlos tengas el nivel que tengas. Tanto si eres principiante como si ya eres un deportista consagrado puedes beneficiarte de la calistenia. Empieza por los más básicos y sencillos si eres novato, y ve añadiendo pequeños cambios para aumentar la dificultad a medida que progreses. ¿Lo tienes dominado? Prueba los retos más exigentes.
La principal ventaja de la calistenia frente a los ejercicios con máquinas es que trabaja el cuerpo entero. Mientras que cuando te ejercitas con máquinas trabajas sólo el grupo muscular que esté implicado en el movimiento, con la calistenia trabajas a la vez todos los músculos del cuerpo aunque estés centrado más en uno concreto y desarrollas la fuerza funcional que sirve para mejorar tu vida cotidiana.
Puedes realizar rutinas aisladas o integrarlas en un programa completo de tonificación muscular o de pérdida de peso, porque sí, aunque no sea su función principal con la calistenia también puedes ayudar a la reducción del volumen corporal.
Una vez que has aprendido a realizar correctamente los ejercicios con la ayuda de un monitor experto puedes practicar tu rutina donde quieras y cuando quieras. Es perfecta si viajas mucho o si tus horarios de trabajo son tan caóticos que alteran tu programa de gimnasio, por eso lleva cientos de años formando parte de los gimnasios de todo el mundo.
